Mi hermano Daryl

Tiene dieciocho años y una discapacidad intelectual entre moderada y grave. Ha asistido al colegio durante 12 años. Nunca pasó más allá de la escuela primaria. 

Ha estado asistiendo también a talleres ocupacionales y participando en varios programas de intervención individual en la asociación donde pertenece.

Lo que Daryl puede hacer es...

Puede colocar 100 clavijas en un tablero. En menos de 10 minutos con un 95% de eficacia cuando está sentado, pero no sabe echar monedas en una máquina expendedora.

Ante una orden, sabe tocarse la nariz, los hombros, las piernas y las orejas. Sigue tratando de hacer lo mismo con las muñecas, los tobillos y las caderas, pero no logra sonarse la nariz cuando quiere.

Puede resolver rompecabezas de 12 piezas a la perfección o pintar un conejo de Pascua respetando los contornos. Le gusta la música, pero nunca le han enseñado a encender la radio o el equipo musical.

Puede doblar y cortar tiras de papel, pero no sabe doblar su ropa.

Sabe trabajar con plastilina y hacer bonitas serpientes de arcilla, pero no amasar la masa del pan o dar forma a las galletas.

Puede ensartar cuentas de colores alternas y hacerlas coincidir con un modelo predeterminado, pero no sabe atarse los zapatos.

¡Reconoce 12 colores diferentes y denomina siete!, pero no puede separar la ropa blanca de la de color para introducirla en la lavadora.

Sabe decir las letras del alfabeto, siempre que no se le interrumpa, pero no puede reconocer el servicio de caballeros y de señoras cuando se encuentra en un restaurante.

Cuando le dicen que el tiempo está nublado o lluvioso, coloca una nube negra de cartulina en un calendario grande que tenemos sobre el día de la semana, pero cuando llueve sigue saliendo sin abrigo ni sombrero.

En el gimnasio, puede andar hacia adelante, hacia los lados y hacia atrás con ayuda de andador, pero no subir sin ayuda las escaleras del gimnasio ni asistir a partidos de baloncesto.

Sabe contar hasta 100 de memoria, pero no cuánto debe darle a la camarera para pagar su cuenta.

Sabe colocar un cubo en una caja, debajo, al lado y detrás de ella, pero en nunca encuentra el tacho de basura. 

Mi hermano Daryl tiene un comportamiento socialmente aceptable, es capaz de cantar y seguir el ritmo de muchas canciones de la radio, pero no hay nadie más en su barrio, con la edad de 18 años, que quiera hacer eso con él.

Entonces, ¿de qué le sirve todo lo que sabe? 

Extraído de "Síndrome de Down: Noticias" de la Fundación S.D de Cantabria. Adaptación.